El otro se ha ido, destruyendo nuestra relación, nuestros sueños y dejándonos solos, presos de la pena y el dolor. ¿Cómo recuperarse después de una separación? Consejos des de la psicología cognitivo-conductual.
Acepta el sufrimiento
Tristeza, enfado, angustia, culpa, melancolía … En una ruptura, nos encontramos abrumados por emociones negativas. Es importante no evitarlas. Tienes que pasar por el dolor para llorar. Y por eso acepta no estar bien por un tiempo. El primer paso es aceptar tus emociones desagradables.
Pero hay un gran deseo de realizar más actividades para despejar la mente, y así “no tener tiempo de pensar en ello”. Tenemos que encontrar un equilibrio. Por un lado, lograr reponernos y, por otro, permanecer a solas con uno mismo, dedicar tiempo a pensar en uno mismo y en tu ex.
Ejercicio “Haz un balance”
Periódicamente, haz un comentario: “¿Dónde estoy cuando pienso en él / ella? “,” ¿Cómo me siento? “… Ésta es una buena técnica para conectarse y evaluar tus emociones. También ten en cuenta las sensaciones físicas que estás experimentando y las dificultades que has encontrado desde tu ruptura. Este inventario te ayudará a ver en qué trabajar.
Maneja la carencia
En los primeros días, la ausencia del otro es difícil. Con esta terrible sensación de que no podrás vivir sin él/ella. Y esa abrumadora necesidad de llamarlo, enviarle un mensaje de texto o espiar su cuenta de Facebook. Por un tiempo, es bueno no tener más contactos ni noticias de tu ex, desintoxicar, recuperar. También es bueno devolverle sus cosas, esconder también sus recuerdos… Porque en el día a día, ciertos objetos, ropa o fotos son recordatorios dolorosos.
Esta limpieza es importante para iniciar el proceso de destete. De lo contrario, es como si estuvieras tratando de dejar de fumar y alguien constantemente te entrega cigarrillos o fuma delante de ti. Después de un tiempo, volverás a fumar uno.
Un retraimiento que se complica cuando tienes hijos juntos, amigos en común o trabajas con tu expareja. Aquellos que se mantienen en contacto inmediatamente después de su ruptura tardan más en superar su sufrimiento.
Ejercicio “Limpiar”
Primero, pon los artículos que te recuerden a tu ex en una caja. Más tarde, cuando estés más estable emocionalmente, podrás decidir qué hacer con ellos. Si puedes, cambia también la decoración de tu vivienda. Durante este período de abstinencia, lleva un diario: en cuanto sientas que vas a contactar con tu ex, escribe en este diario, te ayudará.
Entender por qué no funcionó
“¿Por qué no funcionó entre nosotros? “,” ¿Por qué me dejó “? La pregunta suele atormentar a los ex. Especialmente aquellos que se quedaron sorprendidos o sin explicación. Cuando no se comprende lo ocurrido, el duelo es aún más difícil. Pero en algunos casos hay que aceptar que las explicaciones no vendrán del otro. Hay que buscarlo en uno mismo.
Trabajando en nosotros mismos, podemos encontrar explicaciones. A menudo, cuando una relación termina, tendemos a idealizarla. Pero a priori, si se acababa, no estaba funcionando. Comencemos por hacernos preguntas: “¿Cómo llegamos a esto? ¿Qué estaba mal y quién hizo que terminara?” Y también “¿por qué nos juntamos?”. Por ejemplo, ¿habíamos elegido una pareja que no fuera adecuada para nosotros en la base? Y si es así, ¿por qué? “.
Ejercicio “Escribe tu historia”
Escribe una historia sobre tu historia de amor. Cuenta tus citas, tus rasgos de personalidad, tu comportamiento hacia el otro, los eventos importantes de la relación y cómo terminó. Si es posible, pídele a alguien cercano a ti que lea esta historia. Nos puede dar un toque de realismo: que tu relación lleva un tiempo yendo mal, que hemos sufrido con el otro, que entendemos que el otro se ha ido …
Sal del patrón de amor
A veces, las historias, y las rupturas, se suceden y se parecen. Mismos escenarios, mismas personas que nos atraen, mismas relaciones devastadoras … Un patrón de amor que a menudo tiene su origen en nuestra infancia.
Cuando nos preguntamos acerca de nuestros fracasos románticos, es interesante trabajar en nuestros patrones que nos llevan a repetir escenarios de la vida. ¿Qué reproducimos de nuestra infancia o de una determinada situación que pudimos haber vivido cuando éramos niños? ¿Sufrimos de un patrón de desconfianza (“la gente puede traicionar y decepcionar”)? ¿Imperfección (“si otras personas supieran quién soy realmente, no les agradaría”)? ¿Dependencia (“No puedo arreglármelas solo”)? ¿Privación emocional (“nadie podrá amarme jamás”)? … Trabajo que a veces es bueno hacer con la ayuda de un profesional.
Ejercicio : “Haz una lista de tus ex”
Enumera todas tus historias anteriores: cómo os conocisteis, cómo os fue, cuáles fueron los rasgos de personalidad del otro, cómo terminó … Y trata de encontrar algunos puntos en común.
Tómate el tiempo para llorar
Un amor decepcionado y fallido es fuente de un gran dolor, que a menudo dura mucho tiempo. No es raro que tardes un año en recuperarte. Con el debido respeto a quienes nos rodean, que nos instan a “pasar página lo antes posible”. Como todo duelo, este es único para todos.
Llegará el día que podamos pensar en el otro sin sentirnos totalmente atravesados por el dolor. También llegará el día que incluso podamos sentir cierta amabilidad hacia él/ella, con la idea de que no funcionó, y ya está. Lo ideal es conseguir no razonar en blanco y negro: estar lúcidos sobre lo que nos estaba dando el otro, pero también sobre lo que estaba mal.
Un indicio de que se ha pasado de página es ver a tu ex y decirte a ti mismo/a que no te gustaría que volviera.
Si los pensamientos oscuros o las emociones negativas son demasiado fuertes, no dudes en consultar a un psicólogo. Si sientes que tu dolor se está volviendo realmente agobiante y que estás sin recursos, o que comienzas a desarrollar comportamientos obsesivos hacia otra persona, ve a ver a un terapeuta.
Ejercicio: “Escribe una carta a tu ex”
Es un ritual final que te permite escribir la última página del libro, para cerrar la historia. Decir adiós en voz baja. Si tu carta es muy emotiva, llena de ira o tristeza, el proceso de duelo no ha terminado. Posteriormente, no es necesario que lo envíes. Tú decides.
Autora: Lucia Rodríguez Brines
Apasionada e investigadora de la mente humana. Respeto el sufrimiento humano y procuro ayudar a disminuirlo. Convencida, como psicóloga y como meditadora, de que existe un proceso de evolución de la psique del ser humano. Cómplice del desarrollo de conciencia y valores humanos.
Si estás interesad@ en conocer nuestros servicios de psicología y mindfulness, puedes escribirme a info@psitam.com y estaré encantada de atenderte.
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