Samsara, película (budismo)

Ayer vi una película postergada que tenía pendiente hacía algunos años. Me la habían recomendado hasta la saciedad en el templo budista en el que residí en Dag Shang Kagyu Huesca. Es una película que muestra lo fácil que es regresar a tendencias samsáricas, es decir, permitir que los deseos y la búsqueda de placer se vuelva lo único importante en tu vida.

Sinopsis

En esta historia, un joven monje, ha completado su entrenamiento y culminado una etapa de 3 años de enclaustramiento meditativo en la soledad de una cueva de Himalaya. Los “sacerdotes” del monasterio lo van a buscar y lo llevan de nuevo a la comunidad donde reside. Es nombrado “khenpo” un elevado título de perfeccionamiento espiritual , de sabiduría. Y entonces aparecen las tendencias y los deseos en él. Se despiertan con una fuerza insólita la atracción , el apego, hacia los placeres. Primero trata de obviarlo, pero en él está naciendo la idea de que “se está perdiendo algo” siendo monje, que no está “disfrutando ni conociendo”.

En la película , el joven monje protagonista, toma el ejemplo de Siddharta Gautama, el Buddha histórico más conocido, para argumentar que su interés en el mundo es lícito , que “tiene derecho” a experimentar (al fin y al cabo, al protagonista se le instruyó des de muy pequeño como monje). En cierta manera, en la película se presenta un paralelismo entre el joven monje y Siddharta Gautama.

Nota: Para los que no conozcan la historia de Siddharta pueden leer “Siddharta” de Herman Hesse, o ver la película de “la vida de Buda” protagonizada por Keanu Reeves.

¿Por qué tanto revuelo con esta película?

El joven monje emprende un viaje de búsqueda y realización de una vida mundana. Experimenta el amor, la familia, el trabajo, los negocios, pero también, la rivalidad, las pérdidas, los celos, la insatisfacción, el dolor…. Finalmente surge en él la comprensión de que la vida samsárica, que pretende disfrutar de una vida repleta de placeres es irrealizable, es imposible. ¿Por qué? es imposible mantenerse libre del dolor y el sufrimiento inherente al samsara. En cada situación placentera, de disfrute se esconde la semilla de un dolor futuro. Y aunque ahora estés feliz con lo que tienes, puedes desear más y más (la codicia de los deseos , insaciable).

Final de Samsara: debe decidir

Habiendo probado el sabor del samsara o del placer/dolor dual, inherente a la vida mundana, se decide a regresar a casa, al monasterio. Todavía no está seguro si tomar la decisión, pero, como nos sucede a todos, la decisión la hemos tomado en nuestro corazón mucho antes de ser procesada y elegida conscientemente por el intelecto. El joven monje se rapa el cabello y se viste sus hábitos de monje, y a las puertas del monasterio, se cuestiona si regresar o no, sintiendo dentro de sí una paz indescriptible por hallarse de nuevo en el camino del Despertar.

Conclusión

¡Esta película me ha llevado a la conclusión de que es tan y tan importante decidir por nosotros mismos…!
Creo que este joven monje, después de todos sus avances espirituales se dejó seducir por el samsara porque no había sentido nunca que podía escoger. Necesitaba hacer algo por sí mismo, escogido por él.
Pienso que fue una expresión de autoliderazgo. Necesitaba escoger , tomar su propia decisión. Des de pequeño fue instruido como monje, no tuvo elección, incluso sus avances espirituales probablemente no los alcanzó por puro convencimiento y determinación sino porque “lo tenía que hacer”, de alguna manera habían tomado la decisión por él.
Creo que es crucial que uno mismo tome la decisión de entrar en el camino del Dharma y se convenza por sí mismo de la necesidad de practicar meditación, sólo así podrá saber realmente si lo quiere.

La película Samsara la podéis encontrar fácilmente. Más allá del mensaje , es una película muy satisfactoria a nivel cinematográfico: los paisajes, la fotografía, el desarrollo de las escenas,…

No me queda más que recomendarla y animaros a compartir vuestra opinión con nosotros.

Autora: Lucia Rodríguez Brines

Apasionada e investigadora de la mente humana. Respeto el sufrimiento humano y procuro ayudar a disminuirlo. Convencida, como psicóloga y como meditadora, de que.existe un proceso de evolución de la psique del ser humano. Cómplice del desarrollo de conciencia y valores humanos.

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